viernes, 2 de octubre de 2009

COMPADRES, MADRID 2016 HA MUERTO... ¡VIVA MADRID 2020!


Me gustaría que alguna vez estos cantamañanas del COI se despeñaran con sus decisiones. Que el negocio de Río fuera ruinoso, por ejemplo. El suyo es probablemente el mejor trabajo del mundo: viajar y recibir caricias por parte de mandatarios, primeras damas y otros "lobbistas" (me encanta el palabro). Han preferido la corrección política y la samba a una candidatura sólida. La prueba de lo que digo es la evolución de voto (ver abajo).
Vale, soy un rencoroso.
¡Madrid 2020! Hay que ir a por los malditos socios europeos (con los gabachos a la cabeza) que nos han traicionado pensando en la rotación de continentes y en sus candidaturas para ese año.
De momento... ¿buscamos un billete barato a Río para ahogar las penas con las garotas de Ipanema y Copacabana que están corriéndose una juerga?

VOTACIONES:
Primera: 95 votos. Válidos 94. Madrid (28), Río (26), Tokio (22) y Chicago (18).
Segunda: 97 votos. Válidos 95. Río (46), Madrid (29), Tokio (20).
Tercera: 99 votos. Válidos 98. Río (66), Madrid (32).

3 comentarios:

gonso dijo...

Lo del sistemita de elección, te toque o no, no hay por donde cogerlo. Una lástima para Madrid pero ha tenido que luchar contra el mapamundi y aunque hubiera ofrecido villa olímpica con grifos de oro y mirinda gratis para todo el mundo, no habría habido manera.

No me esperaba lo de Chicago, pero en cuanto cayó lo ví clarinete que se iba para los samberos.

Espero que insistan para los del 2020 y que la cosa no se alargue más porque si no en vez de llevar a nuestros hijos a ver los juegos nos van a llevar ellos con la silla y la sonda.

PacMan dijo...

Una pena. De verdad.

Pepe dijo...

Desde luego de pitonisos no nos comemos una rosca. Vaya encuesta de pacotilla nos salió, muestra que a los miembros del COI no hay Dios que les entienda. Madrid ganó en la primera votación que es la única en la que gana la mejor candidatura.
En 2020 me temo que con París, Roma y el hostión a Obama que habrá que resarcir, no habrá nada que hacer.