lunes, 5 de octubre de 2009

YO QUIERO SER COÍTO



Al hilo del post de Mike, me ha parecido interesante profundizar en el papel de los coítos, término que he escuchado estos días en la radio. Definición de coíto: dícese del miembro del COI, conocida especie de chupópteros abrazafarolas, que en las pocas ocasiones que trabaja acaba jodiendo olímpicamente a alguien.

Yo no se que hay que hacer para ser miembro del COI pero pienso investigarlo y probar fortuna. Son unos cien personajes más bien anónimos y más bien torpes. Dos de ellos no consiguieron emitir ni un solo voto válido en las tres votaciones que tuvieron en cuatro años. Falta de costumbre, supongo. Como parte de su perfil cabe destacar que cobran un pastizal y medio, “trabajan” de pascuas a ramos, se pegan unos viajes de órdago, cada cuatro años se convierten en el puto ombligo del mundo y allá donde van les tratan como a reyes. Para colmo su trabajo consiste en opinar lo que les salga de las pelotas cuando se les pregunta, de forma anónima, casi furtiva, sin necesidad de atender a criterios racionales y sin que tengan que rendir cuentas a nadie posteriormente.

Con todo lo mejor son las brutales felaciones, diplomáticas o reales vaya usted a saber, que reciben cada vez que se juntan todos. Me imagino a más de uno este viernes pasado en Copenhague:

“Ahh Barak sigue, que bien lo haces, sigue que ahhhh! lo mismo voto a Chicago que va a ser uhhhhhhh!, que va a ser que no. Espera Juan Carlos que enseguida estoy contigo, dale la vez ahhhhhhh! a Luuuuula y dile a Micheeeeeeelle! que nooooo! que no se vaya sin pasar por secretaríiiiiiiia”


Por lo visto le pareció mal que Mr. Obama sólo estuviera cinco horas haciéndoles la rosca. Tampoco les debió parecer que la ciudad más votada en primera ronda, en la única en la que se valoran objetivamente las candidaturas y en donde se vota a la que todos consideran mejor, mereciera una mínima consideración por su parte en las siguientes votaciones, aquellas en las que la política se impone.



Un chollo, sin duda el mejor oficio del mundo. No se quien es el valiente que se mete de nuevo a competir en 2020 teniendo que pasar finalmente el filtro de esta pandilla de estómagos desagradecidos y sometiéndose nuevamente al veredicto de un sistema tan antidemocrático como el sufragio universal de rondas sucesivas que ha establecido el COI como método justo de elección. Si quieren hacernos ver que sus decisiones son democráticas que voten una sola vez y el que gane, ha ganado. Y punto. Eso no les molaría, cualquier buena candidatura podría ganar y no podrían manipular el resultado.

Menos mal que en Río el espectáculo está garantizado, al menos en las gradas y todos por ese simple hecho ya salimos ganando. Seguro que más de un coíto ha pensado que todos los cariñitos recibidos en Copenhague la semana pasada no van a ser nada en comparación con las noches tórridas en Copacabana que les esperan como agradecimiento a los servicios prestados.

¡Ayyy, quien fuera coíto!


PD: 3/10. Voy a tener que apretar un poquillo.

3 comentarios:

gonso dijo...

"Coíto ergo sum" que en español significa soy del COI y me Río del mundo.

Espabila

Mike Muddy dijo...

Si queremos unos Juegos habrá que esforzarse más en las felaciones futuras. Es triste, pero es así.

PacMan dijo...

Un empleo a tiempo parcial, con cohechos a mansalva, transporte gratuito y bien remunerado. Un chollo de los que no quedan.