domingo, 9 de diciembre de 2007

EL PUTO HOFMANN

Estimados miembros todos.

Ante la insistencia de algunos de vosotros he decidido salir de nuevo de mi armario. La verdad es que he estado inmerso estos tres últimos meses en la construcción de El Escorial. La verdad es que he sido yo solito el que me he metido en medio de toda la mierda y no sé exactamente el porqué (al margen de que sea un imbécil). En el fondo yo creo que es por dos motivos. El primero es porque mis suegros me caen de puta madre, de verdad que sí, y creo que mi esfuerzo ha merecido la pena y, en segundo lugar, por ganarme el favor de mi mujer (esfuerzo inútil y estúpido obviamente).

Os cuento. Un día me hice la pregunta de qué coño salvaría de mi casa en el caso de que se quemase y después de una rápida reflexión llegue a la conclusión de que las fotos. Solo las fotos, es mi historia y la de mi familia. Desde entonces me puse a digitalizar todas mis fotos, vídeos, etc… y las tengo a buen recaudo en una caja fuerte.

Una vez hecho esto con mi familia y para presumir delante de los demás sacaba el tema en diferentes ambientes. Me sentía un héroe y la gente me miraba con incredulidad, preguntándose: “¿Es posible que este inútil haya sido capaz de hacerlo?”.

Uno de esos sitios donde lo comenté fue en casa de mis suegros y fue entonces cuando se lió todo. Les pregunté por sus fotos, las de sus padres, las de su vida en una palabra y... todas estaban metidas sin orden ni concierto en dos maletas atadas con cuerdas. Impresionante.

Les pedí si me las podían dejar, las quería ver con los niños y ahí me tenéis con las dos putas maletas en mi casa. Un día me armé de valor y las abrí. La sensación fue indescriptible pero me imagino que fue algo parecido a lo que sintió Don Quijote cuando bebió el bálsamo de Fierabrás. El caos. El caos absoluto, fotos desperdigadas por el suelo sin orden ni concierto. Arrugadas, rotas, descoloridas, de todos los tipos, tamaños y colores. Con peña que no había visto en mi puta vida, pero que debían ser alguien relacionado con nosotros. Ante tamaño desorden no sabía qué hacer.

Se me ocurrió que podría hacer un Hofmann (para aquellos que no sepáis, se trata de álbum en las que las fotos están impresas en las propias páginas), que queda de puta madre. Me puse en marcha.

Primero ordené y a clasifiqué (cerca de 1.000 fotos). Ha habido días que al ir haciendo montones en el suelo no se veía ni el parquet (verídico). Una pesadilla.

Una vez ordenadas empezaba la digitalización escaneando una por una, retocando colores, contrastes, brillos, etc., incluso reconstruyendo las más deterioradas. En fin la leche.

Y una vez digitalizadas las tenía que pasar al Hofmann. Nada menos que 78 páginas, y cada una de ellas es una pequeña obra de arte ya que son composiciones distintas con textos diferentes. En fin, para un tío tan limitado como yo una obra descomunal.

Por fin la terminé la semana pasada y la tengo lista para dárselas a mis suegros en Nochebuena (a todo esto ellos no tienen ni idea de este tema, es una sorpresa total).

Espero que les guste, estoy seguro que sí. Estoy orgulloso de lo que he hecho y no es coña, pero se lo merecen (a pesar de su hija).

Solo una cosa, si os vais a meter en un tema de estos tener cuidado y mediros bien las fuerzas, porque aunque al final merezca la pena el esfuerzo… la obra es un auténtico Escorial.

Un beso para todos.

4 comentarios:

Mike Muddy dijo...

Muy bien, Titus. El Hofmann, además, te ha dado para escribir un post. Algún día tendremos que hacer uno de MSB, pero primero el de NYC.

Por cierto, el encargo de "La noche del LP del Pollo con Ana la Morena" sigue en pie, no te escaquees.

No te olvides de poner las etiquetas en tus post (autor Titus, etcétera), ya sabes, en el recuadrito de abajo, entre otras cosas para que aumenten tus paupérrimas estadísticas.

PacMan dijo...

Queridísimo member pródigo: Bienvenido al club de los frikis. No sabes cómo se me ha quedao la cara -y de paso el ombligo se me ha encogido- cuando he leido el relato de tu hercúleo esfuerzo prenavideño. Pensé que los que hacíamos estas cosas éramos sólo unos pocos desocupados o infraocupados, pero incluso hay cabida en el saco para usuarios habituales de la Iberia Plus Oro, como es tu caso. No creo que tu esfuerzo sea nunca medido ni valorado por tus suegros y su hija como se merece, pero has hecho lo que debías y el más exigente de los jueces -que eres tú- seguro te puntúa con matrícula.

Sinceramente, me descubro. Me has recordado a mi santa y a mí mismo, preparando el video de graduación de la clase del mayor de mis hijos en junio de este año: durísima prueba que tuvo como recompensa un saco de lágrimas de compañeros/as y padres/madres en el salón de actos. Ocho años de constante progreso en cuerpos y almas, plasmados en apenas 12 minutos de fotos y videos que acabaron por emocionar al personal. Los más emocionados fuimos nosotros. Titus, yo también te quiero.

Titus Jones dijo...

Gracias chicos, no se que decir, me habeis emocionado. El hacerlo de MSB me la ha puesto como el brazo de un pelotari. Debemos hacerlo.

Besos

Gonso dijo...

Ya decía yo que algo estarías tramando. Ojo con hacer algo bien, luego resultas imprescindible y te vuelves a liar. En cualquier caso sarna con gusto no pica.
Felicidades