Para una que decían que estaba bien colocada para pillar algo en uno de esos deportes extraños que se han inventado, pues va y se escoña en un entrenamiento.
Ya no hay Dios que reconozca las pruebas olímpicas invernales, y la verdad es que muchas suenan un poco a coña marinera. Si lo del curling, la petanca sobre hielo, ya te hacía esbozar sonrisa, lo de las pistas con baches, el half pipe y la pirueta alpina con hostiazo final ya es para partirse por el eje. Una noche de insomnio me entretuve viendo unas pruebas de carreras de snowboard que tenían su emoción pero fuera de eso no le cojo el punto a tanta novedad. Me quedé en el descenso, el slalom y ahora resulta que hay gigante, supergigante, combinada (?) y que sé yo. También está lo de los trineos, que ahora son bobsleigh, luge y skeleton, carreras contra el reloj que quizá disfruten los corredores, pero que como espectador prefiero un campeonato de dardos o si me apuráis un partido de béisbol. Bueno, tampoco hay que pasarse, que lo de ver béisbol ya lo probé una vez y no me vuelven a engañar. Pestiño total.
Sobre el hielo sí me quedo con el hockey, aunque no consigo ver quien lleva la pastilla, sólo se intuye dónde está el tomate por las leches que se van pegando. ¿Os acordáis de la peli "el castañazo" con Paul Newman? esos hermanos Hansen repartiendo estopa...
Y lo del patinaje artístico... puf,
Me quedo con esta prueba alemana, que ojalá triunfe y sea olímpica la próxima vez. Seguro que adeptos gana y la audiencia televisiva se dispara.
Ya sé que no cuenta para el Conan, pero hay ocasiones que no se pueden dejar escapar.
3 comentarios:
Las pivas están buenas, pero han perdido el juicio de tanto aspirar nieve en polvo. Todo lo que suena a invernal... no puede ser muy bueno.
Hay una madrileña que ha quedado la vigésimo segunda (es decir, la 22) en patinaje artístico. Un éxito.
Lo mejor de estas olimpiadas es que son blancas.....magnífico color.
¡Hala Madrid!
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