lunes, 1 de junio de 2009

CONFIRMADO, NO VUELVO

Con la Iglesia he vuelto a topar y de ésta ya no me repongo.
Me llama mi hermana y me pide que sea su padrino de confirmación. ¿Yo? Llegamos a la conclusión de que no hay otro mejor. Ni peor, es más, no hay otro porque la opción Rafa-Fede no es ni tan siquiera opción.
No me da muchos detalles y allí me presento como un pincel endomingado en domingo. ¿Qué tengo que hacer? "Poca cosa, pon tu mano en mi hombro y dices mi nombre que el obispo ya hace el resto"
¿Obispo? Rayos.
La iglesia está petada y hace un calor de la hostia (mucho calor, I mean). Hay revuelo de preparativos, tú aquí, tú allá, ¿los padrinos...dónde están? señora levántese de ahí que esa es la silla de su eminencia, desaloje.
A la una en punto empieza el sarao con entrada solemne; monaguillos, varios curas, uno de ellos de color, de color negro, y cierra el obispo con mitra y báculo. Reparten hojas con las canciones de la misa. Por el número deduzco que la cosa va para largo. No reconozco ni una; por más que busco el alabaré alabaré y la de la arena y la barca no las encuentro. El coro se arranca. La señora de verde chillón dirige con energía y la de la permanente marca el ritmo a taconazos. La misa discurre como todas las misas. Nunca he sabido distinguir una misa preciosa de un coñazo de misa pero he descubierto una nueva categoria: confirmación en domingo caluroso con coro motivado y obispo muermo. A la una y veinticinco empieza la homilia que no termina hasta menos diez, y eso que el mensaje quedó anunciado en las dos primeras frases, pero no hubo manera de parar el parlamento sobre la lucha del cristiano.
Por fin calla el obispo. Los del coro, deseando intervenir se vuelven a arrancar. Ya llevamos una horita y todavía no se ha confirmado nadie. Ya podrían poner un ventilador; la combinación calor-obispo hace sudar a cualquiera.
Se anuncia la ceremonia que empieza con un 3 en 1. Un tipo con barba se bautiza, hace la primera comunión y se confirma todo a la vez. La de pasta que se ha ahorrado en celebraciones; eso sí, se perdió el balón, la bici y el reloj.
Me toca y salgo airoso, detrás de mí salen otros 27 padrinos y hacen lo suyo. Me fijo en un chavalote que sale a confirmarse con una camiseta de Iron Maiden. Sólo un chico lleva corbata, el resto "casual" o mejor dicho cutre.
Parece que se acaba y me froto las manos pensando en poder salir de allí pero craso error. Pasamos al surrealismo puro. Sube al escenario, perdón altar, una del coro y empieza a canturrear: "Santa María Madre de Dios" y la iglesia prorrumpe al unísono en un "ruega por nosotros". Continúa el canturreo y la respuesta unánime repasando el santoral, "Santa Genoveva de Aquitania" "ruega por nosotros", "San Juan de Nepomuceno"... Cuando llevamos 25 santos y mártires me entra la risa y me tapo la cara con la mano, "santa Eduvigis de Ferrara"... No me lo puedo creer, parece un rosario, "Santos Mártires de la Novena Puerta"... De pronto cambia la respuesta y pasamos al "libranos señor". Ya no nombra santos si no cosas terribles de las que nos tenemos que librar y en esto que llega el momento confusión-herejía; o la que leía se lió o toda la congregación va a ir derechita al infierno. El caso es que cuando dijo eso de "la llegada de Nuestro Señor Jesucristo"... todo pichichi dijo "libranos señor". Obispo incluido.
Sería el calor. Pasan el cepillo y suelto diez pavos para que compren un ventilador; los de alrededor echan céntimos.
Por fin, dos horas y diez minutos más tarde el cura de color, negro, interviene. Habla igual que los que venden DVDs en la manta y deja la despedida en suerte para que remate el señor obispo que armado de báculo pronuncia el liberador "podéis ir en paz".
Y tanto que me voy. Y no vuelvo.

4 comentarios:

Mike Muddy dijo...

Ja, ja, ja... Faltó sólo que mencionaran a San Benito Bercimuelles. Me imagino tu careto durante el evento.

PacMan dijo...

Muy bueno. Ya no frecuento los templos como cuando era creyente dubitativo. Ahora que soy un empírico convencido y agnóstico consorte, reniego también de muchos actos que la Iglesia se empeña en mantener. Los sacramentos se han convertido en actos de ostentación vacíos de contenido para la mayoría de los asistentes. Por lo menos, si no crees, te ríes de tanta hipocresía.

yiyi dijo...

no todos los actos de la iglesia son tan rocambolescos. Para los confirmandos seguro que tenía significado
Incluso hay misa que son divertidas, os invito a la de Montecarmelo, la misa de niños, se intenta hacer comprensible para ellos y es un autentico caos pues los niños más paqueños campan por sus respetos
ALGO CAMBIA EN LA IGLESIA

gonso dijo...

Vale Páter. Pero yo no vuelvo.
Y lo de las mayúsculas como que no me lo creo.