martes, 2 de noviembre de 2010

DUBLÍN

De vuelta de la capital de Irlanda.
Baile Atha Cliath, fundada por los vikingos en el año 841 es una ciudad pequeña que ha cambiado poco en su fisonomía desde la última vez que estuve hará ya más de diez años. No tiene grandes atractivos turísticos quitando la visita a su universidad donde se guarda el libro de Kells, el imperio Guinness, los pubs y sus músicos y escritores.
Pero si he vuelto a Dublín ha sido para ver que tal le va al Gonsito durante su estancia de cuatro meses entre los O'Donovan. Y le va de lujo. El tío se ha adaptado rápido y bien a su nueva condición de expatriado, hasta el punto de que casi prefería celebrar eso del Halloween que estar un par de horas más con sus papás. Qué cabrito, ni una lágrima. Ná de ná. Es más, ya está en ese momento en que está dejando atrás su condición de lebrel para convertirse poco a poco en ternasco. Toda una transición.
No puedo ilustrar el post con material gráfico propio porque en mi condición de padre desnaturalizado y de turista fatal, he eliminado de mi equipaje la cámara de fotos y no he tomado ni una sola imagen ni de mi hijo ni de la ciudad. Llevo dos meses baldado con una espalda contracturada en toda su dimensión que cualquier alivio en la carga de peso, aunque sea el de una miserable cámara de 4 Mpx, se agradece.
Bueno, aquí dejo mi post número 200. Quizá el número merecería haber incluido una foto "Gonso old style" pero no estoy para fiestas.
O quizá sí, y aprovecho para invitar a alguien que hace mucho no aparece por esta su casa. Cierto, que además de mis doscientos, con éste, el blog de la Scarlett llega a sus ochocientos.

3 comentarios:

Mike Muddy dijo...

Enhorabuena por lo del ternasco, por tus dígitos en el blog (entre el "new conspiracy" o nuevo contubernio llevamos la mitad de los post de Scarlett)... y larga vida a este invento a pesar de los VyM.

Pepe dijo...

Gonso, habéis dejado de tener un niño en casa para tener un hombrecillo. ¡Qué tio! Mucho mejor para vosotros, supongo que os habréis vuelto la mar de tranquilos. Y encima, estará aprendiendo inglés y todo.
Enhorabuena por los 200. Qué vértigo, no se si algún día seré capaz de llegar.

Titus Jones dijo...

Me alegro que el capullín se haya adaptado sin problemas. Te digo yo que a veces los infravaloramos.