miércoles, 19 de septiembre de 2007

JUST FOR MEN III

Vivimos tiempos de estereotipos. Me considero un tipo medio. De altura media, nivel cultural medio, de clase media, medio feliz. Si gana el Atleti, completamente feliz. Me encuentro todas las noches con un trío de parejas españoletas en Tele 5, y me identifico con la del medio: él es el ibérico al uso, más bien bajo, su puntito de mala leche y barriga cervecera. Le pierde el hecho de salir a bronca por parrafada con su costilla -una de las Virtudes-. Pero lo bueno del caso es que ambos son más salaos que una ración de anchoas. Cada frase de Roberto y Marina es un canto a las desavenencias conyugales de un matrimonio con la decena larga de años a la espalda. Y se quieren los jodíos, pero cada dos palabras se tiran a la yugular. Pues bien, parece que acierta el guionista cuando pinta así al matrimonio de mediana edad, con sus conflictos eternos. Uno de ellos, las salidas de Roberto con sus amigotes mientras Marina se queda en casa o peor: se funde la VISA en El Corte Inglés.



Mis amigos y yo nos vemos de higos a brevas y cuando lo hacemos sólo convocamos conflictos a nuestro alrededor. Yo soy el primero en proclamarme nenaza porque cada vez que miento un "Just For Men" o similar es como si mentara la bicha. Tampoco es para tanto. No nos vamos de putas ni nos bebemos hasta el Manzanares, tan solo nos reímos de un tiempo, ni mejor ni peor, en el que estábamos solos. Sin "ellas" y sin "ellos/as". A veces tenemos miedo, todos nosotros, de quedarnos como estábamos, porque no hay consuelo mejor que el consuelo de teta o de ubre. Así que claudicamos por no tocar mucho los huevos, y nos arrugamos. Bien vale un polvete en ano que ciento con la mano.

Este finde toca "nenazas" y lo pasaremos de puta madre en Picadas con nuestros lebreles y nuestras pares. No es broma, yo me lo paso bien de cualquier manera y disfruto de la compañía de chicos y grandes. Pero tengo ganas de pasar otro JFM completo, además de otras cien rutas con toda la tropa. Así que Mike, no te desanimes y arrojes la toalla; no me quites la ilusión de otro JFM diez, o quince, o veinte años después del anterior. Aún quiero tener esperanza. Aún necesito imaginarme que nos podemos poner de acuerdo todos los members y todas nuestras respectivas familias para tener ese espacio de libertad para nosotros solos. Sin caras largas, sin chantajes, sin rechinar de dientes u oclusión de labios. Volviendo a los estereotipos, me niego a amargarme por no poder quedar con los amigos pensando en las posibles represalias. Llegará el día en que conciliemos marchas multifamiliares con homenajes al estilo medieval. Aunque tengamos que alquilar un minibús con conductor. Me niego a renunciar. Tarde o temprano, amigos. Tarde o temprano.

4 comentarios:

Mike Muddy dijo...

Gran post entre la melancolía y la esperanza. No creo que seamos españoletos medios: ya quisiera la media tener nuestro currículum (salvo en conquistas femeninas). No obstante, creo que los JFM (salvo alguna esporádica cena) pasaron a la historia. No sé, tal vez cuando seamos sexagenarios y nuestras santas y lebreles pasen de nosotros. Quien desee quitarme la razón, que empiece a ofertar desde ya.

yiyi dijo...

Estoy de acuerdo con Paco.Es posible el JFM sin problemas,solo necesita la adecuada planificacion con tiempo

Mike Muddy dijo...

Cierto, éste hemos tardado 10 años en planificarlo. Hace falta un poco más de margen.

Gonso dijo...

En tu descripción de lo del tipo medio estoy contigo salvo que soy más feliz que tú porque el Madrid gana más veces. Lo de Tele 5 no se que es, los intelectuales medios sólo vemos la 2 (y la del viernes en el plus)