Hace pocos años, en plena fiesta de la abundancia, éramos proclives a destinar nuestros esfuerzos en campañas solidarias con el Tercer Mundo. El Movimiento 07, o lo que es lo mismo, la parte de la sociedad que no tenía intereses directos en la gestión del pastel del Estado creció y se desarrolló. Caló en el personal y en los medios de comunicación con éxito variable, mas no pasó de ahí. Las instituciones del Estado recibieron con tibieza la solicitud: no es moco de pavo destinar el 0,7% del PIB a ayudas humanitarias. Eran muchos miles de millones de euros.
Pero el sueño acabó abruptamente. Con el 2008 llegó el lobo que nos habían contado. Y aquí estamos, a oscuras en un túnel, viviendo la pesadilla que ya dura demasiado tiempo. Sólo sabemos que seguimos bajando a oscuras. Item más, el jueves pasado me anunció mi empresa que íbamos a firmar un acuerdo (ELLA y yo, pobre de mí). Se trata de que me reducen un 7% de golpe para por según qué. Es decir, que como está todo tan mal y tal y tal, y no hay clientes, y no pagan los que hay, pues que nos apretamos otro poco el cinturón y ya si vuelve a haber y vuelven a pagar, que entonces ya si eso... Desde 2008 ya va el 18% de reducción. Y doy gracias a Dios porque seguimos en la brecha.
Don Mariano dice que "no deben pagar justos por pecadores". Debe ser que no estoy libre de pecado, que si no... iba a ver alguno cómo lanzo.