jueves, 21 de marzo de 2013

CHEPISMO

El chepismo es uno de los deportes nacionales. Seguro que en otros países también se practica, pero en España somos auténticos maestros. Si hubiera campeonatos mundiales de chepismo ganaríamos siempre. Los que practican el chepismo se llaman chepistas. Los reconoceréis enseguida: surgen como setas a vuestra espalda en un momento de estrés laboral. Suelen tener cargos importantes. Tú curras y ellos miran... o peor, opinan, agobian, estresan, estorban, abroncan... lo que sea con tal de no remangarse y echar una mano. Es curioso cómo los chepistas sobreviven a la crisis económica, los EREs y casi cualquier hecatombe: su único peligro es un chepista que ha subido más en el escalafón y les echa el aliento en la nuca, aunque al final todo el caudal de chepismo cae, en cascada y de forma inexorable, sobre el pobre currete, inocente de los éxitos y culpable de los fracasos. Me gustaría decir: "Yo de mayor quiero ser chepista", pero es imposible, porque ya soy mayor y no lo he conseguido, y el tiempo que me queda debo emplearlo en sobrevivir a los chepistas profesionales.

2 comentarios:

Pepe dijo...

Yo también los he visto. Conocedores perfectamente de la anatomía humana lo mismo se colocan a tu chepa, que te tocan los cojones, que te chupan la sangre, que te dan por culo, que te echan una mano al cuello, que siegan la hierba bajo tus pies, que chupan el pene alfa. Y alguno sin tan siquiera ser jefe, y es que los hay que vienen de cuna.

El consuelo que nos queda con estos personajes es que algún día les llegue su san Martín, y que en vez de chepa tengan chapa por vía anal que les indique la dirección de la puerta. Tiempo al tiempo.

yiyi dijo...

La verdad que no conocía la especie, pero una vez descrita la identifico perfectamente
Enhora buena por el hallazgo e identificación de este nuevo genero