martes, 8 de noviembre de 2011

EL COORDINADOR


Al coordinador del programa internacional de Secundaria lo llamaron al despacho, allá por el mes de mayo, y le ofrecieron el puesto.
"Hemos tenido nuestras diferencias en el pasado pero creo que eres el idóneo" le dijo la directora.
Hace unos años al coordinador entrante le habrían temblado las piernas ya que sus predecesores en el cargo han subido meteóricamente en el organigrama; directora incluida. Pero la verdad es que puso cara de póker e hizo preguntas de carácter técnico sin demostrar sentimiento alguno. No hacía falta impresionar a nadie ni aparentar un interés fingido; después de 20 años en la casa ya le tienen calado y no hay secretos.
"Me la juego contigo. Ya sabes que arriba del todo no caes precisamente bien, así que a partir de ahora te quiero en todos los saraos y se ha acabado lo de ser invisible". Con ofertas así, piensa el coordinador entrante, no hay forma de decir que no. "Quizá tengas menos clases y por el sueldo ni preguntes pues ya sabes que un buen día te llega un nómina distinta y ya está, te guste o no". Lo dicho: irrechazable.
A partir de ese momento, al nuevo coordinador del programa internacional le cambió la vida laboral y también, por qué no, la otra. Se le acabó lo de esquivar marrones de esos que pululan y te esperan a la vuelta de la esquina, que en su condición de veterano de la guerra de las Galias conseguía siempre colocarle al novato de turno. Ya no. Ya no puede decir a otros su ya famosa frase de la peli "La chaqueta metálica" que el cabrón del negro pronuncia ante el cadaver de un compañero de pelotón caído en combate: "Mejor tú que yo" Ahora le caen de dos en dos y a pecho descubierto, sin chaqueta metálica.
Al flamante nuevo coordinador del programa internacional se le empieza a inundar el correo de más cosas de las que está acostumbrado y no da abasto con la lectura de múltiples documentos imprescindibles. Intenta organizarse la agenda y programarse racionalmente pero los acontecimientos le sobrepasan y lo urgente se antepone a lo importante.
Pasado el primer agobio, el nuevo coordinador se acostumbra a vivir en el alambre y se empieza a sentir a gusto conviviendo con cientos de cosas para hacer, hasta que descubre que repartir juego le libera de agobios.
Cuando empieza a dominar la situación le anuncian que tendrá que encargarse de la preparación de la auditoría del programa internacional prevista para la vuelta del verano. El mes de julio se convierte en una máquina de crear y recopilar documentación de esa que nadie se lee pero que es imprescindible y además debe conocer y ser capaz de defender delante de los auditores.
El nuevo coordinador pasa la auditoría Cum Laude y enseguida se ve envuelto en conferencias, congresos, cursos de liderazgo y viajes al extranjero. Definitivamente la directora tenía razón y ya no es invisible.
La actividad frenética hace que descuide otras rutinas como escribir en el blog de los colegas o lo de construir con piezas de LEGO. Solo consigue reservarse un par de horas a la semana para ir a la piscina a hacer unos largos, pero un día descubre que su bañador Speedo ha perdido prestancia y la Lycra traicionera se ha deshecho dejándole la popa al aire, así que deja de nadar durante unos días hasta que el equipo de natación femenino que entrena en la calle de al lado, olvide la imagen de ese culo peludo de coordinador emergiendo del agua por la escalerilla.
"Puto oficio" se dice el coordinador del programa internacional cuando todos los días abre el portátil y se encuentra otra sorpresa más. Un día decide que hay que volver a los cuarteles de invierno y lo primero es escribir unas líneas en el blog para que sus colegas sepan que aún existe, así que aprovecha unos minutos después de comer y cuando ya está a punto de darle a las teclas le llega un correo con una invitación para ir a visitar un centro espacial en Rusia. A tomar por saco otra vez. A responder al ruso.
"Puto oficio" repite el flamante nuevo coordinador del programa internacional de secundaria, "...pero qué puto oficio"

5 comentarios:

Jose dijo...

Lo siento, me he descojonado con tu crudeza -aunque no tenga ni pizca de gracia-.
Y da gracias que fue la popa y no la proa......

PacMan dijo...

¿Rusia? No suena tan mal. Nene, tú vales mucho.

yiyi dijo...

Enhorabuena coordinador
Con el tiempo todo el mundo avanza en su carrera y lo peor es que no se puede decir que no
Disfruta de tu nuevo cargo y sácale todos los aspectos positivos

Pepe dijo...

Ánimo Gonso. Ya has dado el salto a los llamados puestos de gestión, que parecen ser una etapa laboral a la que se llega después de haber demostrado ser un profesional competente. Ahora tendrás elementos de juicio para saber que te mola más, si lidiar con los chavales o con los marrones del día a día. No descartes que acabes echando de menos escuchar que te llamen Don Gonzalo.

Mike Muddy dijo...

El puesto equivalente al tuyo en mi curro consiste, básicamente, en resolver la vida a otros mientras jodes la tuya, por eso llevo más de veinte años despejando ese balón. Pero en tu caso no tiene por qué ser igual. Ánimo... y suerte con el nuevo bañador.