Miss Scarlett's Band nace en 1986 después de un viaje mítico a Galicia en el "Súper 8" y "La Cabra". Ligeros de equipaje (cuatro duros, cuatro latas y un infiernillo), aquellos patanes sobrevivieron a cogorzas y cagaleras de la muerte para fundar el grupo musical más impresentable del último milenio. Versionando temas clásicos, sus letras ocupan un lugar de privilegio en la historia de la ignominia (por suerte, los objetos de tan lacerantes versos se mantienen en una tranquilizadora ignorancia). El nombre de Miss Scarlett's Band se refiere a Scarlett O'Hara, la protagonista de "Lo que el viento se llevó", aunque la inspiración nos llegó más bien de Hattie McDaniel, la inolvidable Mammy de Escarlata. Gigi, un genio del falsete, imitaba muy bien a la negra y oronda criada del profundo sur: "Señorita Escarlaaata, tengo mucho mieeedo, señorita Escarlaaata". No sé por qué coño nos hacía tanta gracia esa gilipollez, pero así se escribe la historia. El caso es que después de grabar varios álbumes, MSB superó su carácter de banda cochambrosa y se constituyó en el núcleo duro de nuestra pandilla de amistades. Los "memberfaces" no se discutían. Eran una hermandad. Los demás eran "novias" o "satélites". Con el tiempo esas novias se convirtieron en algo más peligroso, llegaron los vástagos y la cosa se jodió bastante, a pesar del digno intento de algunos por organizar eventos "Just for men". Las "hazañas" de antaño quedaron para echar unas risas en las cenas anuales (una en verano y otra en Navidad, cada vez con menos quórum). La leyenda terminó diluyéndose como un azucarillo en una taza de café. El mito acabó siendo un rumor. Parecía que la banda iba a caer en el olvido...
...hasta hoy.